viernes, 25 de octubre de 2013

Luces... ¿o sombras?

20 de octubre de 2013. Estadio Artemio Franchi. Minuto 15 de partido. Los seguidores locales aprovechan que el juego está parado para atender a Bonucci y entonan un canto que un servidor no puede apreciar. Aunque deduzco que va en contra de la Juventus o de su entrenador. Antonio Conte acompaña los últimos segundos del cántico con una sonrisa irónica. Moviendo los brazos al compás, simulando ser el director del coro. Al finalizar, aplaude de nuevo con gran ironía a los aficionados viola. Estos le responden con una sonora pitada. Su equipo, la Juventus de Turín, va empatando a ceros. Pero domina y parece mejor plantada sobre el terreno de juego. No intuía ni por asomo el varapalo que se iban a llevar sus hombres en Florencia. De nuevo malas sensaciones, y un duelo el miércoles en el Bernabéu que podría dejarle en una posición delicada en Liga de Campeones. Y se enfrentaba a un Real Madrid que venía de completar un buen encuentro contra el Málaga. Carlo Ancelotti ha sido muy discutido en este inicio de campeonato, y parecía al fin empezar a ver la luz al final del túnel. El partido de Liga de Campeones podía relanzar a uno y meter al otro en una situación complicada. O volver a meter en el disparadero al ex del PSG y dar un respiro al otrora capitán bianconero.

Y al término del choque, sucedió algo bastante común pero también engañoso... Ambos salen reforzados y ambos salen perjudicados. Según como se quiera ver. ¿En qué salen reforzados? El Real Madrid suma una victoria ante un rival de prestigio, y deja prácticamente vista para sentencia su clasificación para octavos de final. Además el triunfo se ve como una continuación de buenos resultados (cuatro victorias consecutivas) que le deja en una buena situación de cara al Clásico. Un partido en el que además su rival acumula dos partidos seguidos sin ganar. La Juventus se marcha del Santiago Bernabéu con una más que decente actuación global. Con 11 hombres sobre el campo dominó durante varias fases del encuentro y tuvo varias llegadas con mucho peligro. Con un jugador menos, aguantó el marcador hasta el final y acabó provocando los pitos de los aficionados merengues contra su escuadra. Además, se marcha con la sensación de que solamente el arbitraje impidió sacar algo positivo.

¿Qué es lo negativo? El Real Madrid vuelve a encajar, esta vez en un error que propicia que primero Pogba y después Llorente rematen solos. No solo eso, sino que concede bastantes llegadas que acaban con varios disparos con mucho peligro. De hecho su rival remata más veces que él a los largo de los 90 minutos. Sigue demostrando que le cuesta llevar el peso del choque pero tampoco domina del todo lo de ceder el balón y salir al contragolpe. No es capaz de cerrar el choque ante un conjunto con un jugador menos durante más de media hora. Y sigue teniendo a Benzema con una crisis de confianza bestial. Por su parte la Juventus suma su segunda derrota en tres días. Seis goles en dos partidos. Ya sé que solo son números, pero me parecen significativos. Poco plan tras la expulsión. Debería haber arriesgado algo ante un rival que estaba especulando. No generó ocasiones más allá de la incertidumbre que se provoca en un encuentro que no está sentenciado en el tramo final. La actuación de Chiellini, aunque sea uno de los mejores centrales europeos, estuvo muy lejos de ser buena. Y la situación en la que se queda no es límite, pero casi. Todo apunta a que el duelo de la última jornada en Estambul contra el Galatasaray decidirá el pase de la Juventus. No parece un escenario muy apetecible para la Vecchia Signora.

No hay comentarios: